Fuente: HOY
El IPS intentó ceder las instalaciones del Centro Residencial Especializado de Atención y Apoyo para el Adulto Mayor (CREAM), ubicado en San Bernardino, al Grupo San Roque para que lo convierta en un hospital covid, con la instalación de 200 camas en 15 días y cuyo contrato duraría seis meses. El sanatorio privado finalmente retiró su propuesta ante los cuestionamientos surgidos.
Vicente Bataglia, presidente del IPS, fue consultado este viernes en el canal Gen y radio Universo sobre la supuesta concesión irregular que se pretendía hacer con el Centro de Adultos Mayores de San Bernardino, donde antes de la pandemia estaban los jubilados de la previsional.
Al respecto, la autoridad detalló que recibieron la propuesta del Grupo San Roque para que el IPS haga una cesión, no una concesión, de su predio para que el sector privado pueda instalar allí 200 camas dentro de 15 días, para atender casos Covid. Este contrato iba a tener una duración de seis meses.
“Nosotros pusimos a consideración del Ministerio de Salud si era factible o no esta propuesta. Nosotros prestamos la casa, la empresa privada lo pone operativa y lo paga Salud (el 80% de las camas iban a ser para pacientes del sector público)”, comentó y agregó que se estaba estudiando la factibilidad de la propuesta, si la empresa privada tenía la logística suficiente y si el Ministerio contaba con el presupuesto correspondiente.
El titular del IPS aseguró que la oferta no está abierta únicamente a una empresa, aunque solo el San Roque se acercó a la Previsional, sino a cualquiera que desee hacerlo. “Será una cesión y no una concesión, se iba a ceder en un lapso determinado y debía devolver en las mismas condiciones en que recibió. Era beneficioso el convenio para nosotros porque era que nos dejen así como pusieron para que nosotros podamos operativizar luego o en las mismas condiciones en que les entregamos al principio”, agregó.
Sobre el rol social que cumple ese sitio para los adultos mayores, dijo que es consciente de la importancia del centro, pero subrayó que hace un año está cerrado por la pandemia. Recordó que antes del covid, ese sitio albergaba a los jubilados del IPS, pero que con la llegada del virus, se dispuso que no era seguro tenerlos juntos allí ante el riesgo de un contagio masivo. Durante los primeros meses de la pandemia el lugar se convirtió en un albergue transitorio para los viajeros que retornaban al país, pero actualmente está vacío.
Respecto a cómo avanza la tratativa, Bataglia informó que ante los trascendidos y cuestionamientos, la empresa privada retiró su oferta y está evaluando otras opciones que resulten más convenientes.