Fuente: La Nación
Con pasos cargados de esperanza se acercan abuelos y abuelas para recibir la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19, que están destinadas para las personas de 85 años en adelante, en el Hospital Materno Infantil de Trinidad, este martes. Los adultos mayores, acompañados de sus familiares, se muestran contentos y aliviados tras la aplicación de la inmunización que se da de acuerdo con la terminación de su cédula de identidad.
Las dosis que reciben los adultos mayores son de las vacunas de AstraZeneca y la Sputnik V, mientras que para mañana el hospital recibirá el inmunizador Covaxin. “Estoy muy contento, no puede ser mejor, estoy muy feliz. Yo voy por los 86 años. Voy a poder pasear por fuera de casa. Antes no podía salir. Hay que seguir siempre las indicaciones de los médicos porque son los especialistas”, dijo Fermín Sánchez, en contacto con el canal GEN.
Por su parte, María Virginia Bozzano, de 91 años, fue una de las primeras personas en llegar hasta el Hospital de Trinidad. Ella llegó junto a sus dos hijas, caminando lentamente, pero con la esperanza intacta. “A mis 91 años ya tuve una linda vida, ahora quiero que los que me rodean la tengan. Esta plaga es impresionante cómo está llevando gente”, manifestó emocionada.
También llegaron doña Yolanda de González, de 94 años, y don Pablo González, de 85 años, una pareja casada desde hace más de 30 años que se acercaron juntos hasta el hospital. Sus familiares celebraron que ambos ya cuentan con las primeras dosis de las vacunas anti-COVID.
La aplicación se realiza este martes para los adultos mayores de 85 años en adelante con terminación de cédula de identidad entre el número 0 al 3. Mientras que el miércoles lo podrán hacer personas cuyos documentos terminen de 4 a 6 y el jueves del 7 a 9. Aclaran que en las tarjetas de vacunación figura la fecha que corresponde la segunda dosis que se aplicará en las próximas 4 semanas.
Sobre el temor que pueden tener personas para acudir a vacunarse, alientan a acercarse debido a que no tienen consecuencias ni efectos secundarios graves. Resaltan el beneficio de los inmunizadores para la salud de los abuelos y abuelas. “No tengo miedo, al contrario, quiero esa vacuna“, expresó don Rogelio Cardozo.
En total son 80 vacunatorios los habilitados en las 18 regiones sanitarias del país que están habilitada para la vacunación a personas adultas mayores de 85 años en adelante. Por otro lado, ayer se lanzó el registro de adultos mayores que se encuentran inhabilitados para movilizarse, en cama o en silla de ruedas, destinado a personas de 60 años y que no están censadas en una Unidad de Salud Familiar (USF).